Barack Obama tendrá una agitada agenda en la visita histórica que lleva adelante en Cuba, donde el encuentro con Raúl Castro es uno de los momentos más esperados.
A primera hora de la mañana, Obama se trasladará al barrio El Vedado para depositar una ofrenda floral en el gran memorial dedicado a Martí ubicado en la Plaza de la Revolución, y participar de un tour por el edificio más alto de toda la ciudad que contiene un museo y un mirador a 129 metros de altura, desde donde es posible contemplar la ciudad.
En un día que será de clima más templado tras las intensas lluvias de ayer, el mandatario estadounidense recorrerá en su limusina conocida como “La Bestia», los cinco minutos que separan al museo del Palacio de la Revolución para participar de un encuentro bilateral con el líder cubano Raúl Castro, quien tras la foto oficial de rigor, lo recibirá con una ceremonia de bienvenida.
Cerca de las 11 de la mañana (12 en la Argentina), los presidentes mantendrán su encuentro privado.
Concluida la reunión, tendrá lugar una declaración conjunta que según versiones que corrían en La Habana podría cambiar de formato a último momento y convertirse en conferencia de prensa.
Por la tarde, el líder demócrata visitará el puerto para brindar un discurso y participar de un intercambio con emprendedores locales y estadounidenses en La Cervecería del Puerto, un gran local recientemente renovado, ubicado en la zona de muelles que supo tener protagonismo económico y ahora forma parte de los sitios en la ciudad que están siendo revitalizados.
Al finalizar, se trasladará hacia el barrio Miramar, donde está ubicada la residencia del embajador Jeffrey DeLaurentis, a cargo de la sede diplomática norteamericana en La Habana, y que durante su estadía se convirtió en el hospedaje presidencial.
En los 20 minutos que separan a La Cervecería de la residencial norteamericana, tendrá la posibilidad de ver en primera persona los cambios que están teniendo lugar desde hace ya un tiempo y que cada vez son más visibles, principalmente en el área de la Vieja Habana y a lo largo del Malecón habanero, donde es posible ver con claridad las renovaciones edilicias que fueron llevadas adelante desde hace siete meses, cuando el secretario de Estado, John Kerry, visitó la país para la reapertura de la embajada norteamericana en La Habana.
A la noche Obama finalizará su primer día del viaje histórico a Cuba en el Palacio de la Revolución, que lo esperará con una cena celebrada en su honor encabezada por Raúl Castro.
Telam