Por Gabriel Rodriguez
Después de medio año al frente del gobierno, el presidente Javier Milei mantiene una imagen positiva, aunque enfrenta serias dificultades en el Congreso.
Según el último sondeo de Opina Argentina, realizado entre el 3 y el 5 de junio con la participación de 1.720 personas de manera online, la imagen de Milei se ha mantenido estable, con una caída de solo un punto en la valoración positiva (52%) y un aumento equivalente en la negativa (48%) en comparación con abril.
El estudio también mostró una estabilización del apoyo al Gobierno, con un 46% de los encuestados manifestando su respaldo, frente a un 40% que se identificó con la oposición y un 14% que no se inclinó por ninguna de las opciones.
A pesar de la crisis que llevó a la salida de varios funcionarios, otros referentes del gobierno libertario también conservaron su imagen positiva. La vicepresidenta Victoria Villarruel cuenta con un 53% de valoración positiva y un 45% negativa; la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, con un 52% positiva y un 47% negativa; y el ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, con un 42% positiva y un 55% negativa.
Minoría en el Congreso
La limitada representación de La Libertad Avanza en el Congreso (38 diputados y 7 senadores) ha complicado la aprobación de proyectos y medidas impulsadas por el oficialismo. Tras el rechazo del DNU 70/2023 por parte del Senado, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, está trabajando para destrabar las negociaciones que permitan sumar apoyos para la media sanción restante de la Ley Bases y el paquete fiscal.
Desde su presentación a finales de diciembre, el megaproyecto ha sido achicado, modificado y negociado con la oposición dialoguista. Aunque obtuvo aprobación general en el Congreso el 2 de febrero, fue retirado debido a las discrepancias en el articulado.
Después de una nueva ronda de debates y la participación de gobernadores y titulares de bloques, el Poder Ejecutivo está afinando los detalles para tratar el proyecto el próximo miércoles a las 10, en una sesión que se espera se extienda hasta la madrugada del jueves 13.
Mientras tanto, el DNU que pretende modificar, sustituir y derogar más de 100 leyes o decretos sigue vigente, aunque permanece congelado por orden del oficialismo. Para su derogación se necesita el rechazo de ambas cámaras, y hasta ahora solo ha sido tratado en una.
“Todo va a cambiar en 2025 después de las elecciones legislativas”, prometen desde el círculo íntimo del Presidente sobre las dificultades legislativas actuales.
