El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, fue recibido por su par cubano, Raúl Castro, en un histórico encuentro que se llevó a cabo en La Habana, luego de la tensa relación que ambos países han llevado durante décadas.
Ambos presidentes se saludaron con un apretón de manos y posaron sonrientes ante las cámaras antes de la reunión privada que sostuvieron, la tercera desde que en diciembre de 2014 se anunció el deshielo en las relaciones entre ambos países.
Los dos mandatarios ya habían entablado un diálogo fluido en el Palacio de la revolución, cuando vino el saludo a los ministros. Castro llegó a tomarlo del brazo para indicarle a Obama por dónde seguir, para tomarse la foto oficial.
La imagen que ya recorre el mundo, se erigió con los dos sentados en sus sillones, separados por una pequeña mesita con flores azules, blancas y rojas y las dos banderas.
Con ese entorno y mucho verde detrás, comenzó la trascendente charla entre estos dos hombres que están terminando con medio siglo de Guerra Fría y divisiones en todo el continente.
Cuando sonó el himno de los Estados Unidos en el palacio, Obama y Castro se mostraron realmente conmovidos. El mandatario estadounidense manifestó que le provocó una enorme emoción ver a una banda cubana tocar el himno de su país.