Argentina pide a la Corte Penal Internacional detener a Maduro
Por Alejo Pombo
El Gobierno argentino, a través de la Cancillería dirigida por Diana Mondino, pidió formalmente al fiscal de la Corte Penal Internacional (CPI) que solicite a la Sala de Cuestiones Preliminares el dictado de órdenes de detención contra el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y otros altos funcionarios de su gobierno. Esta acción llega tras los controvertidos comicios presidenciales del 28 de julio, en los que Maduro fue declarado vencedor con el 51,2% de los votos, frente a su principal oponente, Edmundo González Urrutia, quien obtuvo el 44,2%.
Según un comunicado oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores de Argentina, el pedido se basa en las evidencias recogidas por la Fiscalía de la CPI en el marco de las investigaciones sobre crímenes de lesa humanidad cometidos por el régimen de Maduro. Además, se destacan los hechos ocurridos tras las elecciones, que incluyen la intensificación de la represión contra ciudadanos venezolanos y opositores políticos.
El resultado electoral fue rápidamente cuestionado por la oposición venezolana y por observadores internacionales. Actas emitidas por fiscales de la oposición señalaron una ventaja significativa de González Urrutia, quien supuestamente había superado a Maduro con un margen del 70% al 30% en el conteo de votos. Estas irregularidades desataron protestas masivas en Venezuela y provocaron una condena generalizada por parte de sectores democráticos en la región.
En este contexto, el Gobierno argentino también repudió la orden de detención emitida por el Ministerio Público venezolano contra Edmundo González Urrutia. Según las autoridades chavistas, González Urrutia está acusado de delitos de conspiración, usurpación de funciones y sabotaje de sistemas, cargos que han sido calificados por la comunidad internacional como una maniobra para silenciar a la oposición. El comunicado argentino alertó sobre la posibilidad de una «ola de radicalización» por parte del régimen de Maduro, dirigida a criminalizar a las fuerzas democráticas del país.
La acción diplomática de Argentina forma parte de un esfuerzo coordinado con otras naciones de América Latina, Centroamérica, África y Europa, que también han solicitado el cese inmediato de la represión en Venezuela. Esta postura refleja el compromiso del Gobierno argentino con la defensa de los derechos humanos y la democracia en la región, en línea con las políticas adoptadas en otros foros internacionales.
El caso de Venezuela continúa generando tensiones diplomáticas y podría ser objeto de un mayor escrutinio en los próximos meses, especialmente en el marco de la CPI, donde se espera que este nuevo pedido argentino impulse una acción concreta contra el presidente Maduro y su gobierno.