Por Gabriel Rodriguez
La Corte del distrito de Columbia, Estados Unidos, dispuso el decomiso del avión Boeing 747 de la empresa venezolana Emtrasur que está retenido en el aeropuerto de Ezeiza, en el marco de una investigación por presuntos actos de terrorismo que aún tramita en el juzgado federal de Lomas de Zamora a cargo del juez Federico Villena.
La información sobre la decisión del tribunal estadounidense fue anunciada en Twitter por el analista y comunicador Sebastián Maril, quien incluso publicó un facsímil del fallo.
El avión de la empresa venezolana Emtrasur quedó retenido en Ezeiza a raíz de un convenio de colaboración entre la Argentina y Estados Unidos, mientras se desarrollaba la parte inicial de la investigación sobre 14 venezolanos y cinco iraníes que llegaron a borde de esa nave a la Argentina el 6 de junio pasado.
Tras una investigación que se prolongó por cuatro meses –en los que los extranjeros tuvieron prohibida la salida del país-, todos fueron sobreseídos o beneficiados con falta de mérito y se levantaron las medidas cautelares que pesaban sobre ellos.
Lo propio ocurrió con la aeronave, que no tiene restricción alguna por parte de la Justicia argentina pero permanece retenida por pedido del Estados Unidos.
El abogado de Emtrasur en la Argentina, Maximiliano Rusconi, dijo a NA que la decisión de la Corte de Columbia deberá recorrer el camino del Departamento de Estado norteamericano y de allí a la Embajada argentina en Washington, lo que aún no ha ocurrido.
«La Argentina tiene muchos argumentos para rechazar el pedido.
Debería decir que un juez federal local intervino ante la sospecha de un ilícito. En ese contexto hubo una medida cautelar y un pedido de colaboración de Estados Unidos a efectos de hacer una inspección sobre el avión», explicó.
«Se avanzó en la causa penal, con lo cual si en la causa principal por la cual se detuvo el avión en la Argentina ya no existe en términos de imputación, las cautelares –que son accesorias- no tienen razón para ser ejecutadas», añadió.
«La Argentina no debería decir nada sobre la decisión de la Corte estadounidense porque no es el sujeto pasivo del reclamo.
Vaya y reclame a Venezuela, pero no hay razones para que Argentina retenga el avión», analizó.
El avión es de fabricación estadounidense y fue adquirido por la iraní Mahan Airlines antes de 2008.
Ese año, una resolución de 2008 del gobierno de Washington en el contexto del denominado «combate contra el terrorismo» estipuló que la aeronave no podía ser transferida a ningún comprador sin la intervención de Estados Unidos.
El gobierno norteamericano considera que la venta a Emtrasur violó esa prohibición y por lo tanto pidió su decomiso, que fue avalado por la Justicia local.