24 abril, 2024

El Cosquín Rock celebró sus 18 años con dos postales sobre el género

La segunda y última jornada de la 18va. edición del Cosquín Rock, que culminó esta madrugada, mostró dos de las dimensiones posibles que el género ostenta en la Argentina con las convocatorias masivas de La Vela Puerca, Ratones Paranoicos, Guasones y Los Gardelitos y las buenas performances de otras propuestas menos multitudinaria que muestran atisbos de una esperada renovación estética.

La segunda y última jornada de la 18va. edición del Cosquín Rock, que culminó esta madrugada, mostró dos de las dimensiones posibles que el género ostenta en la Argentina con las convocatorias masivas de La Vela Puerca, Ratones Paranoicos, Guasones y Los Gardelitos y las buenas performances de otras propuestas menos multitudinaria que muestran atisbos de una esperada renovación estética.

Córdoba. The Offspring, tocó en la segunda y última jornada de la 18va. edición del Cosquín Rock, que culminó esta madrugada en el galpón del Quilmes Garage.
Foto: Laura Lescano

En esa corriente deben inscribirse los debuts en el escenario principal de El Mató a un Policía Motorizado y Los Espíritus (bandas que, de todos modos, tienen 15 y 8 años de existencia) y las explosivas presentaciones de los mendocinos Perras on the Beach y Usted Señalemelo que colmaron de público y fervor el galpón del Quilmes Garage, convocatoria que el sábado no había logrado ningún otro show alternativo.
Entre esas dos corrientes, que son casi contrapuestas, el tablado uno también albergó -quizá como intento de puente entre ambas- al puertorriqueño Residente con un recital intenso que durante casi una hora generó los primeros pogos del domingo.
El ex Calle 13 hizo equilibrio entre algunos hitos de aquel dúo y su nueva faceta en solitario para construir un espectáculo de fuerte impacto salpicado por denuncias, multiritmos, corrección política, demagogia y no pocas zonas confusas.
Al frente de una banda plurinacional (que incluye al notable pianista argentino Leonardo Genovese) y con una remera con el nombre del ex boxeador Sugar Ray Leonard, el artista hizo una docena de canciones entre las que se contaron «El aguante», «Baile de los pobres» y «No hay nadie como tú» (las tres de Calle 13), además de «Somos anormales», «Desencuentro», «Calma pueblo» y «Vamos a portarnos mal».
Después de Residente, las listas plagadas de hits de los uruguayos de La Vela Puerca y Ratones Paranoicos, la visita de The Offspring y el cierre con Los Gardelitos le pusieron color y calor a una noche donde el frío constante y la lluvia por momentos desaconsejó estar al aire libre.
Más temprano, por la tarde, pero con las mismas condiciones climáticas adversas, El Mató a un Policía Motorizado salió a escena alrededor de las 17 y generó una actuación consistente que le hizo justicia a su tránsito estético y a la posibilidad de que ese discurso adquiera mayor alcance.
De hecho, durante su actuación el público -que en buena cantidad de agolpó en el lugar- hasta agitó una bandera de La 25 y, en la despedida, uno de los dos guitarristas del combo punteó el fraseo de «Ji Ji Ji» en un gesto burlón que jamás continuó el clásico Redondo y poguero.
El quinteto platense contó sus sensaciones como «esta es la mejor versión de mí» (en «El mundo extraño»), «tranquilo todo va a estar más o menos bien» (en «Más o menos bien») y «hoy espero que vuelvas» (en «Chica rutera»), además de otros bellos pasajes en «Ahora imagino cosas» y «Mujeres bellas y fuertes».
A continuación fue el turno del sexteto porteño Los Espíritus -que el año pasado había tenido un reconocido paso por un tablado alternativo de este mismo festival- y que exhibió solidez y aplomo para mostrar sus señas de identidad.
La agrupación propuso sus brumosas fusiones también abonadas por sus regulares viajes por Latinoamérica y se ganó la atención de la audiencia con canciones como «Jugo», «Perdida en el fuego», «Jesús rima con cruz» y la estupenda «La mirada» («el pasaje salió el doble y ninguno dijo nada/hay demoras en el subte y ellos se aguantan la mirada/el trabajo dignifica eso dice mi patrón»).
Con esa misma búsqueda de novedad, en el Quilmes Garage hubo doble cita mendocina con ascendentes bandas que actuaron una a continuación de la otra: El jovencísimo e irreverente cuarteto Perras on the Beach y la atractiva hondura de Usted señalemelo.
Perras, con sus integrantes con vestidos de mujeres y un discurso atravesado por excesos, drogas, exilios y fraternidades sobre un sonido eléctrico al que no acompañaron los ajustes y las fidelidades, generó un pogo constante y una fiesta permanente.
«Australia», «Puchos», «Turco X», «Amigos» y «Tuca» (éste último con la participación del cantautor Luca Bocci, también joven y mendocino) integraron el set de 45 minutos de duración.
Seguramente atentos a los problemas de sonido de sus predecesores, los Usted Señalemelo se tomaron su tiempo (unos 20 minutos) para ajustar tuercas, pero el esmero valió la escucha.
Impulsado por el tridente que componen Juan Saieg (voz, coros y sintetizador), Lucca Beguerie (batería, percusión, programación y coros) y Cocó Orozco (voz, coros, guitarra y piano), y sumando bajo y teclados, el grupo mostró su impronta dramática para encarar un repertorio propio y atractivo.
Con dos discos editados y con la experiencia de haber pasado por el festival chileno Rockódromo y los porteños Ciudad Emergente y Lollapalooza, los mendocinos mostraron su pericia para hacer dialogar el folclore argentino con el indie internacional.