28 abril, 2024

Detenciones y choques con la policía en la asunción de Trump

Sin lograr empañar hasta el momento la ceremonia de asunción a la presidencia de Donald Trump, diferentes movilizaciones de protesta surcaron la capital estadounidense, que en tono festivo y pero también con roturas de vidrieras de bancos y comercios, desembocaron corridas y al menos 95 detenidos.

Sin lograr empañar hasta el momento la ceremonia de asunción a la presidencia de Donald Trump, diferentes movilizaciones de protesta surcaron la capital estadounidense, que en tono festivo y pero también con roturas de vidrieras de bancos y comercios, desembocaron corridas y al menos 95 detenidos.

«Numerosas personas» fueron detenidas hoy en Washington «por intentar interferir en las celebraciones» de la asunción de Trump a la presidencia, fue la escasa información brindada por la policía local que no precisó cuántos fueron los arrestados en las protestas que sucedieron antes y después de la ceremonia.

Sin embargo, la cadena CNN habló de, al menos, 95 detenidos durante las jornadas de protestas.

En una ciudad blindada por el operativo de seguridad, manifestantes opositores consiguieron igual protestar por la llegada de Trump al poder en diferentes columnas que tuvieron distintas improntas, desde un tono lúdico y festivo hasta acciones violentas que emprendieron contra diferentes comercios de Washington.

Desde bien temprano, decenas de manifestantes de organizaciones de derechos humanos y de izquierda, entre ellas Black Live Matter (las vidas negras importan), se juntaron frente a varios puestos de control que permiten la entrada a las celebraciones y, por momentos, lograron frenar la entrada del público.

Con bailes, banderas arcoiris y carteles de «No a Trump», decenas de manifestantes se concentraban en las entradas del público a los diversos puntos de la Avenida Pensylvania o la explanada del National Mall desde donde quienes no poseen los pases oficiales pueden contemplar la investidura.

Voceros de las organizaciones informaban a Télam a media mañana que su intención era bloquear el ingreso de los simpatizantes del flamante mandatario, pero también tratar de demorar el inicio de la ceremonia de asunción.

«No forma parte de la democracia poner puestos de control, tenemos derecho a protestar de manera pacifica», gritaron los manifestantes, abucheados por los partidarios republicanos.

Rápidamente la Policía apartó a los activistas a empujones y liberó una zona con un cordón humano integrado por decenas de efectivos para improvisar un corredor para que los simpatizantes de Trump pudieran acceder al predio para seguir la asunción.

La escena, que incluyó forcejeos y empujones pero no detenidos, se repitió en numerosas oportunidades en diferentes puntos de acceso al predio, pese a que las protestas se encuentran prohibidas durante el día de hoy en la mayor parte de la ciudad de Washington.

Una situación de más tensión se vivió cuando grupos de anarquistas también intentaron frenar el ingreso de asistentes a la ceremonia, armando cadenas humanas que fueron desarmadas por la policía a fuerza de gases lacrimógenos.

En su retirada, los manifestantes identificados con el Black Block, un especia de fuerza de choque de los grupos radicales, emprendió contra varios comercios, especialmente contra cadenas multinacionales como Mc Donalds y Starbucks, pero también contra sede bancarias a las que les rompieron lo vidrios a piedrazos.

En un tono totalmente opuesto, la ONG DCMJ convoco a centenares de personas en una de las protestas más particulares de la jornada.

Reclamando la continuidad de la política de despenalización de marihuana, la organización distribuyó cientos de porros entre los presentes, como forma de alertar sobre una hipotética marcha atrás durante la administración Trump del proceso de liberalización de su consumo en Estados Unidos.

Entre los participantes, una gran mayoría de críticos del nuevo presidente, también podía verse más de un simpatizante del magnate neoyorquino que se convirtió hoy en el 45to. presidente estadounidense.

«Estamos realmente preocupados. Solo por condenas por posesión de marihuana han perdido el derecho al voto de manera permanente 2,5 millones de personas en los últimos 25 años» expresó Adam Eidinger, director de la DCMJ.

Por la tarde, luego que Trump se trasladara desde el Capitolio a la Casa Blanca, los manifestantes buscaron bloquear el camino por el que transitará el desfile presidencial previsto para 15 hora local.

En un virtual juego del gato y el ratón, las protestas se trasladaban de uno a otro de los cuatro puntos «sensibles» en los que los manifestantes especulaban que podrían romper el vallado policial.

Las fuerzas de seguridad por su parte, respondieron las arremetidas con gases lacrimógenos y eventuales cargas que dispersaba a los manifestantes que, lejos de las filas de antidisturbios, se volvían a reunir a reunir para hacer un nuevo intento o para replegarse hacia alguno de los otros puntos.

En diferentes puntos del mundo también se sintió la asunción del magnate a la presidencia de uno de los países más poderosos del mundo.

En Londres, decenas de miembros de diversos grupos activistas se reunieron esta mañana en nueve puentes diferentes a lo largo del río Támesis.

Mientras que en España, el partido izquierdista Podemos se sumó a la campaña contra Trump con el despliegue de una pancarta con el lema «Construyamos puentes, no muros» en el céntrico Puente de Toledo de Madrid.

Protestas similares, pero con escasa concurrencia, tuvieron lugar en una veintena de ciudades de Francia, Alemania, Portugal, Bélgica y Holanda.

En Asia, centenares de personas encabezadas por activistas de izquierda salieron a las calles de Manila, la capital de Filipinas, hacia la embajada estadounidense para pedir al presidente Rodrigo Duterte que se mantenga alerta frente a Trump y mantenga una política exterior independiente respecto a Estados Unidos y reclamaron la retirada de las tropas estadounidenses de Filipinas.

En tanto en África, un grupo separatista de Nigeria denunció hoy que once de sus miembros fueron muertos durante una acción represiva de la policía en momentos en que participaban de una marcha en el sur del país para celebrar la llegada de Trump a la Casa Blanca.

«Han atacado a nuestra gente; once han resultado muertos por disparos», dijo la portavoz de los independentistas Emma Powerful, en un comunicado, informó la agencia de noticias EFE.

La policía no obstante, negó que se hayan registrado víctimas mortales en el incidente, aunque admitió que actuó para «prevenir la violación de la ley y el orden», de acuerdo con una declaración pública del portavoz Nnamdi Omoni.