Violencia en Villa Mercedes: Partido suspendido por agresión a un árbitro, se evalúan sanciones
Por Alejo Pombo
Un partido de primera B en Villa Mercedes se vio abruptamente interrumpido este sábado debido a un acto de violencia dentro del campo de juego. El encuentro, que se disputaba en la cancha del Club Atlético Colegiales, enfrentaba a Asociación Deportiva del Oeste y el Club Santa Rita de Casia. Con el marcador empatado 1 a 1 hacia el final del juego, la situación se descontroló cuando el árbitro Alan Becerra cobró un penal a favor de Asociación Deportiva del Oeste.
Incidentes en el campo de juego
La decisión del árbitro provocó una reacción violenta por parte de los jugadores y el cuerpo técnico del Club Santa Rita de Casia. «Dos o tres jugadores se descontrolaron intentando agredir al árbitro. La tensión fue tan alta que no se pudo continuar con el partido», explicó Héctor Lombardi, presidente de la Liga Mercedina de Fútbol, en declaraciones a El Chorrillero. La seguridad privada, encargada de la protección de los árbitros, no logró contener la situación, lo que llevó a la suspensión inmediata del partido.
Reacciones y medidas inmediatas
Tras el incidente, los árbitros de la ciudad decidieron suspender un partido de la categoría Sub 17 del Club Santa Rita como medida de protesta, indicando que por el momento no dirigirán a ningún equipo del club involucrado en la agresión. Los dirigentes de la Liga Mercedina se reunirán el próximo martes para abordar la situación, con un enfoque en la seguridad privada y policial, así como en el comportamiento de los jugadores y cuerpos técnicos, que ha mostrado un patrón preocupante de agresividad en los últimos partidos.
Evaluación y sanciones
El presidente de la Liga, Héctor Lombardi, recibió también agresiones mientras presenciaba los disturbios. «Una persona del cuerpo técnico intentó golpearme, aunque el golpe no llegó a impactar», relató Lombardi. Esta semana, la mesa directiva de la Liga recibirá un informe detallado del árbitro, que será remitido al Tribunal de Penas. Basándose en este informe, se determinarán las sanciones correspondientes para los agresores.
Un problema interno
Lombardi enfatizó que los problemas de violencia no provienen del público, ya que no ha habido conflictos entre hinchadas desde el inicio del campeonato. «El problema en Villa Mercedes es dentro de la cancha», subrayó. El presidente instó a los dirigentes de cada club a asumir su responsabilidad en la elección y gestión de los cuerpos técnicos y jugadores, y a trabajar juntos para erradicar la violencia del fútbol local.
Reflexión sobre la violencia en el deporte
Lombardi también hizo un llamado a la concientización y a la necesidad de medidas contundentes para detener las agresiones en los partidos. «La sociedad enfrenta problemas personales y económicos que parecen trasladarse al campo de juego. Pero debemos recordar que es solo un partido de fútbol. Ganar, perder o empatar no debe llevarnos a la violencia», concluyó.
La Liga Mercedina de Fútbol se enfrenta ahora al desafío de implementar cambios significativos para asegurar la seguridad y el espíritu deportivo en sus competiciones, buscando evitar que incidentes de esta naturaleza vuelvan a ocurrir.