3 mayo, 2024

Tras la suba de casos en la región el Gobierno analiza endurecer las fronteras

El Ministerio de Salud evalúa avanzar en restricciones para desalentar los viajes a zonas con circulación de las nuevas cepas de coronavirus. Preocupa sobre todo la variante brasileña.

Por Alejo Pombo

El Ministerio de Salud evalúa avanzar en restricciones para desalentar los viajes a zonas con circulación de las nuevas cepas de coronavirus. Preocupa sobre todo la variante brasileña.

El Ministerio de Salud evalúa, junto con las carteras provinciales, la posibilidad de adoptar a partir de este viernes nuevas medidas en las fronteras y desalentar los viajes a zonas con circulación de nuevas cepas de coronavirus, con el foco puesto principalmente en Brasil, ante el riesgo de una segunda ola de coronavirus en el país.

A través de una videoconferencia, autoridades sanitarias de la cartera a cargo de Carla Vizzotti participaron de una nueva reunión del Consejo Federal de Salud (Cofesa) y analizaron también la adopción de controles para los transportistas que ingresen al país.

En ese contexto, coincidieron en la necesidad de reforzar los controles de cumplimiento del aislamiento de los viajeros para mitigar el impacto de la introducción cepas de mayor transmisibilidad, como las brasileñas de Manaos y Río de Janeiro, la británica y la sudafricana.

A lo largo del debate, los referentes de las distintas jurisdicciones plantearon que es importante mantener los casos estabilizados, dado que todas las provincias se encuentran abocadas a escalar la vacunación contra el coronavirus en los grupos priorizados, añadieron las fuentes de la cartera de Salud.

En la actualidad, la Argentina continúa con sus fronteras cerradas para los extranjeros, salvo que ingresen en viajes autorizados para desarrollar alguna actividad esencial, mientras que los argentinos no tienen ninguna restricción para ingresar o salir del país.

La reunión de las autoridades sanitarias estuvo encabezada por la jefa de Gabinete de Salud, Sonia Tarragona, y contó con la presencia de la secretaria de Acceso a la Salud, Sandra Tirado; el secretario de Calidad en Salud, Arnaldo Medina; la directora nacional de Epidemiología y Análisis de la Situación de Salud, Analía Rearte; y Claudia Madies, directora nacional de Habilitación, Fiscalización y Sanidad de Fronteras.

Antes del encuentro, el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollan, había anticipado que se iban a implementar nuevas medidas tarde o temprano, como restringir la salida de turistas hacia zonas de fuerte circulación de las variantes más peligrosas y establecer cuarentena para unos 7 mil viajantes que deben regresar a la Argentina desde esos destinos.

«Hay 7 mil turistas que tienen que regresar al país desde estos lugares. En el decreto que hay que cambiar el día 12 de marzo (fin del DISPO), respecto de las medidas que se toman para afrontar la pandemia, se tomará la decisión de restringir fuertemente la salida de nuevos turistas hacia las zonas de circulación del virus», adelantó el funcionario bonaerense.

Y remarcó que «quienes regresen, tendrán un sistema de cuarentena, lo que implica que cumplan diez días de aislamiento y tengan un alta con PCR o 14 días de cuarentena para evitar que se disperse el virus en el país».

«Existe preocupación por tres variantes: la sudafricana -que no circula comunitariamente en la región-, la inglesa -sobre la que hubo cinco detecciones en el país-; y la Manaos -esa está muy extendida en Sudamérica; Brasil y países aledaños-, pero en Argentina se contuvieron los casos», precisó Gollan.

En esa línea, completó: «Hasta el momento no hay circulación comunitaria de ninguna de esas variantes en Argentina, pero hay preocupación porque en Chile, Paraguay y Uruguay los casos están aumentando».