Pese al avance del coronavirus, Trump planea masiva celebración por la Independencia de EEUU
El presidente estadounidense, Donald Trump, celebrará hoy el Día de la Independencia con un saludo a la nación y un despliegue de fuegos artificiales en Washington que se espera congreguen a miles de personas, ignorando recomendaciones de funcionarios de salud de evitar festejos masivos en medio del mayor repunte del coronavirus en el país en dos meses.
El «Saludo a Estados Unidos» de esta tarde incluirá un discurso del mandatario desde la Casa Blanca para celebrar la historia y tradición del país, así como un sobrevuelo de aviones de guerra y una gran batería de fuegos de artificio en el National Mall, la zona de jardines rodeada por museos, monumentos y memoriales ubicada en el Monumento a Washington y el Capitolio.
El presidente abrió las celebraciones anoche con un discurso en el estado de Dakota del Sur al pie del famoso Monte Rushmore, donde están tallados en la montaña los rostros de los expresidentes George Washington, Thomas Jefferson, Abraham Lincoln y Theodore Roosevelt, cuatro de los mayores próceres de la nación.
En un comunicado emitido hoy por el 244 aniversario de la adopción de la Declaración de la Independencia, Trump admitió que «en los últimos meses, el espíritu estadounidense sin duda fue sometido a prueba por muchos desafíos», en una alusión al coronavirus y a una ola de protestas contra el racismo tras la muerte de un afroamericano, George Floyd, a manos de un policía blanco.
La participación del presidente en grandes concentraciones de personas va a contramano de la decisión adoptada por autoridades de muchos estados o localidades de prohibir los fuegos artificiales y otras tradiciones por el Día de la Independencia, o de cerrar playas y parques para evitar aglomeraciones.
El objetivo de estas medidas es tratar de contener el fuerte aumento de los casos de coronavirus, el mayor en dos meses, que están registrando entre 36 y 40 de los 50 estados del país luego de reabrir sus economías tras superar sus anteriores picos de contagio.
Por tercer día seguido, Estados Unidos registró ayer más de 50.000 casos del nuevo coronavirus, 51.842, según la base de datos de la Universidad Johns Hopkins.
El país, el más afectado por la pandemia, ya suma más de 2,79 millones de contagios y más de 129.000 muertes.
El repunte de la Covid-19 afecta sobre todo a estados del Sur y el Oeste, como California, Arizona, Texas y Florida, que marcaron récord de casos diarios varias jornadas de esta semana.
Florida registró ayer 9.500 luego de haber marcado un récord de más de 10.000 el día anterior, mientras que Texas documentó ayer 7.555 contagios tras dos días con unos 8.000 cada uno.
Para el evento en el Monte Rushmore, al que asistieron miles de personas, la gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Neom, una aliada de Trump, dijo que no era necesario guardar distancia social y que el uso de barbijo era opcional.
El Centro para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos ha advertido que las grandes concentraciones de personas como la planeada para esta tarde en Washington podrían potenciar la propagación del coronavirus.
En busca de su reelección en noviembre, Trump ha estado haciendo todos los esfuerzos posibles por retornar el país a la normalidad, presionando a favor de reaperturas con mayor premura que la mostrada por autoridades de muchos grandes estados y ciudades.
Tras haber minimizado originalmente la gravedad de la enfermedad, también se ha resistido a usar barbijo en público, como recomienda su Gobierno, y como le han pedido legisladores de su Partido Republicano.
El mes pasado, celebró su primer acto de campaña desde marzo en Oklahoma, al que asistió menos gente que la esperada. Días después realizó otro acto en Texas. Pocas personas usaron barbijo en ambos eventos.
Funcionarios del Departamento del Interior dijeron que se repartirán 300.000 tapabocas para el evento de hoy en Washington.
La alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, que no puede cancelar las celebraciones porque se realizarán en tierras federales, advirtió ayer de los obvios peligros de un acto tan multitudinario.
El discurso de Trump está previsto para las 18:40 (las 19:40 en Argentina).