Llegó el segundo vuelo de Aerolíneas con 14 toneladas de insumos médicos desde China
El segundo vuelo de Aerolíneas Argentinas que arribó esta mañana al país procedente de China trajo 14 toneladas de insumos críticos sanitarios requeridos por el Gobierno Nacional -en especial, material de laboratorio para realizar testeos- que contribuirán a enfrentar la pandemia de coronavirus.
Tras más de 55 horas de viaje y luego de una escala de abastecimiento en Auckland, Nueva Zelanda, el Airbus 330-200, especialmente acondicionado para el transporte de cargas mediante mallas contenedoras que permitieron ampliar su capacidad hasta un 84% extra, tocó pista a las 8.20.
En el aeropuerto de Ezeiza supervisaron la descarga del material los ministros de Salud, Ginés González García, y de Transporte, Mario Meoni, junto al titular de la empresa estatal, Pablo Ceriani.
El material sanitario incluye insumos de laboratorio para realizar testeos, trajes de bioseguridad, barbijos quirúrgicos, máscaras de protección médica, y una máquina que produce hasta 7.000 barbijos por hora.
Ginés González García señaló que hoy «es un momento muy especial, porque empiezan a concretarse las largas gestiones, está llegando la línea de insumos esenciales; en una línea para la protección de los trabajadores, y en una segunda línea, con reactivos que nos permitirán mejorar la capacidad de prevención».
«Sabemos que existe una circulación viral comunitaria, por lo que era necesario proveernos de los elementos necesarios para enfrentar la situación. En ese sentido estamos incentivando producir lo que se pueda producir, pero comprando afuera todo lo que haya que comprar», explicó Ginés.
En ese sentido detalló que «el avión trae barbijos quirúrgicos, pero fundamentalmente trae una máquina que utilizará una industria privada para fabricarlos, con una capacidad de entre un 1.800.000 y 2.000.000 de barbijos».
Indicó, además, que «una gran parte de lo que trajo el avión, fue una compra realizada por nosotros, pero también vinieron donaciones, como 170.000 de los 440.000 test rápidos que llegaron y que fueron donados por la industria farmacéutica local».
«Estos reactivos epidemiológicos serán distribuidos de acuerdo a la población y el estado epidemiológico de las provincias, así como la evolución de las infecciones. Los reactivos llegarán a todo el país, tenemos suficiente stock», afirmó el ministro.
Por su parte Meoni remarcó que «frente a una situación crítica como la que estamos atravesando, la línea de bandera nacional, está dando respuestas y es sumamente importante poder contar con una herramienta de estas características».
«Quedó demostrada la capacidad de respuesta de Aerolíneas al poder diagramar en pocos días un vuelo que no es habitual, lo que demandó un gran esfuerzo del personal, gracias a lo cual estamos pudiendo asistir a todos los argentinos, brindando respuestas a cada sector y que nos permite, por encima de todo, salvar vidas», destacó el funcionario.
Adelantó que «seguramente hará más vuelos de los que están planificados, porque la demanda así lo irá determinando, pero lo importante es que contamos con Aerolíneas Argentinas a disposición de estos traslados».
A su vez el presidente de Aerolíneas, Pablo Ceriani, sostuvo que están «muy contentos por cómo viene saliendo la operatoria, se está realizando sin contratiempos en coordinación con Cancillería, con el consulado en Shanghái y todo está saliendo muy bien».
En una conferencia de prensa ofrecida esta mañana en el Salón Malvinas Argentinas del Aeropuerto Internacional de Ezeiza, junto a González García y Meoni, Ceriani dijo que el personal de la empresa «está realizando un trabajo formidable».
El funcionario remarcó que «este es el segundo de ocho vuelos que tenemos programados por el momento, esta tarde sale el tercero y cada uno nos va permitiendo afirmar las cuestiones operativas para seguir estando a disposición de la Presidencia de la Nación, del Ministerio de Salud y del gobierno de la provincia de Buenos Aires».
El vuelo había partido desde suelo argentino el viernes por la tarde en una operación que se extendió a lo largo de aproximadamente 44.000 kilómetros y requirió de cinco horas de trabajo en el aeropuerto de Shanghái para la carga de todos los materiales médicos en la aeronave.
Al igual que el primer vuelo que arribó el sábado, para esta operación se tuvo en cuenta las distancias por cubrir y las características propias de la aeronave, debió hacerse un análisis específico de las rutas aéreas ya que la aeronave deberá volar previendo una alternativa de aterrizaje a una distancia máxima de 180 minutos.
La tripulación estuvo integrada por cuatro comandantes -Carlos Grecco, Gustavo Caponelli, Rodrigo Arribillaga y Marcelo Ejberowicz-; ocho copilotos -Alejandro Florentino, Juan Bonelli, Juan Quintana, Walter Piazza, Philipe Letestu, Hernán Aravsky, Pablo Golder Venneri y Javier Sanahuja-; cuatro técnicos de vuelo -Sergio Regidos, Rodrigo Tavella, Pablo González García y Gustavo González-; un despachante operativo, Mauricio Falce y un despachante de cargas, Diego Maciel.
Todos el equipo tuvo que permanecer a bordo de la aeronave durante el viaje de manera tal que se respeten las condiciones de aislamiento.