29 marzo, 2024

El Gobierno Nacional aplica incremento sobre el impuesto a los combustibles

El gobierno nacional resolvió aplicar el incremento al impuesto a los combustibles líquidos postergado en cuatro oportunidades desde mayo último, pero las petroleras deberán tramitar una autorización para trasladar a precio.

El gobierno nacional resolvió aplicar el incremento al impuesto a los combustibles líquidos postergado en cuatro oportunidades desde mayo último, pero las petroleras deberán tramitar una autorización para trasladar a precio ese aumento en el marco del congelamiento vigente.

La medida se adoptó hoy a través del decreto 753/2019 publicado en el Boletín Oficial, por el cual el Ministerio de Hacienda modificó las fechas establecidas de aplicación de los ajustes de la carga impositiva sobre los combustibles líquidos y que habían sido sucesivamente postergados.

De esta manera, la normativa dada a conocer hoy determinó que para los hechos imponibles que se perfeccionen desde el 1 de setiembre hasta el 31 de octubre, deberán mantenerse los montos del impuesto que correspondan al 31 de agosto de 2019.

Hasta hoy, ese plazo había sido fijado al 30 de noviembre, y recién a partir del 1 de diciembre comenzaba a aplicarse la suba total del gravamen, pero la nueva modificación dispone que en cambio desde el 1 de noviembre último deberá considerarse el incremento total en los montos del impuesto.

Fuentes del sector petrolero explicaron esta tarde que efectivamente la modificación impositiva rige a partir del 1 de noviembre pero en el marco del congelamiento de precios de combustibles vigente no hay posibilidad de que las empresas puedan traspasar a los surtidores el incremento.

Por el contrario, otra fuente entendió que esa actualización impositiva está contemplada dentro del aumento del 5% autorizado a las petroleras la semana pasada y que entró en vigencia en los primeros minutos del 1 de noviembre.

En ese sentido, en una de las compañías se resaltó que la recomposición de precios del 5% quedó prácticamente licuada con los aumentos del 6% que el mismo gobierno autorizó para los biocombustibles -utilizados para los cortes de naftas y gasoil- y el movimiento del crudo Brent de las últimas jornadas.

De esta manera, las petroleras estiman que es poco lo que se pudo recuperar del diferencial del 20% que se estimaba hasta el 1 de noviembre entre los precios congelados y la paridad de importación, ecuación que comenzarán a desandar a partir del 14 de noviembre cuando se libere la posibilidad de fijar nuevos valores.

A partir de la decisión de hoy, para los hechos imponibles que se perfeccionen entre el 1 y el 30 de noviembre, el incremento en los montos del impuesto será de $ 0,142 por litro para las naftas, y de $ 0,27 para el gasoil.

Los productos alcanzados por la medida son nafta sin plomo, hasta y de más de 92 RON, nafta virgen, y gasoil.

El impuesto a los combustibles se previó que se actualizase por trimestre calendario sobre la base de las variaciones del Índice de Precios al Consumidor (IPC), considerando las variaciones acumuladas desde enero de 2018, inclusive.

Sin embargo, desde el 28 de mayo último el Gobierno postergó en cuatro oportunidades, hasta la actual aplicación del incremento.