El Ministerio de Defensa de China informó hoy, a través de su página web, que aprobó un prototipo de vacuna subunitaria contra el coronavirus y que realizará ensayos clínicos.
El desarrollo de la vacuna, dirigido por la científica Chen Wei de la Academia Militar de Ciencias Médicas china, comenzó a principios de enero desde Wuhan en la provincia de Hubei, epicentro del coronavirus, informó la Televisión Central de China, citada en la página oficial del Ministerio.
Según explicó Chen, la vacuna también completó el trabajo de preparación preliminar para la producción en masa.
Una vacuna subunitaria contiene sólo un fragmento del patógeno para estimular una respuesta inmune protectora, según la definición de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Por otra parte, está previsto que otras vacunas contra la neumonía Covid-19 desarrolladas por instituciones de educación superior de China estén listas a la brevedad, también para ensayos clínicos, informó la agencia de noticias china Xinhua.
Lei Chaozi, funcionario del Ministerio de Educación, dijo en una conferencia de prensa que la vacuna basada en vectores virales de gripe se encuentra actualmente en experimentación con animales para pruebas de seguridad y eficacia, mientras que la presentación de solicitudes para realizar ensayos clínicos está programada para fines de abril.
El funcionario explicó que pidió a las universidades de alto nivel, centros de investigación y empresas que aceleren el desarrollo de la vacuna contra el coronavirus.
La droga fue desarrollada por Chen Wei, la principal experta en bioguerra militar de país, y su equipo. La investigadora de 54 años, también comandante general del Ejército Popular chino, ha estado trabajando en la vacuna contra el coronavirus desde que llegó a Wuhan, epicentro del brote, el 26 de enero, según la prensa local.
“La epidemia es como una situación militar. El epicentro equivale al campo de batalla”, aseguró Chen, en el marco de su investigación para dar con una vacuna que detenga el avance del coronavirus, que ya ha provocado la muerte de más de siete mil personas en todo el mundo.
Tras casi dos meses desde el comienzo de sus tareas, la especialista anunció que anoche Beijing otorgó el permiso para dar inicio a las pruebas.
“La vacuna es el arma científica más fuerte para acabar con el coronavirus”, aseguró. Y agregó: “Si China es el primer país en inventar tales armas y tiene nuestras propias patentes, muestra el progreso de nuestra ciencia y la imagen de un país gigante”.
Chen también es especialista en vacunas de ingeniería genética en China. En 2003 desarrolló un aerosol médico durante el brote de Síndrome respiratorio agudo grave (SARS), que permitió que alrededor de 14.000 trabajadores médicos no contrajeran el virus.
La investigadora también es conocida en su país como “la terminator del ébola”, ya que también lideró un equipo para crear una vacuna contra esa enfermedad.
En 1991, Chen Wei se graduó de la Universidad de Tsinghua. Con la intención de servir al Ejército, ingresó a la antigua Academia de Ciencias Médicas Militares. Después de servir como directora del laboratorio, dirigió el equipo durante más de diez años y desarrolló con éxito la primera vacuna recombinante que se incluyó en la reserva estratégica nacional. Este logro estableció al equipo de Chen Wei como líder en este campo.
Tras el gran aporte que brindó en 2003 para hacer frente al SARS, en 2008, después del terremoto de Wenchuan, las autoridades solicitaron a Chen Wei liderar el equipo de salud y prevención de epidemias del Comité Nacional de Expertos en Ayuda en Desastres del Ministerio de Ciencia y Tecnología.
En febrero de 2014, un brote a gran escala en África occidental y la rápida propagación de la epidemia del Ébola causaron pánico a nivel mundial. A fines de ese año, la científica china dirigió a su equipo para desarrollar la primera vacuna contra el brote.
En 2020 Chen Wei volvió al centro de la escena al liderar la investigación para dar con una vacuna que detenga la propagación del coronavirus que tiene en vilo a todo el mundo. De acuerdo a lo indicado por la científica, en conformidad con las normas internacionales y las reglamentaciones nacionales, las vacunas se han preparado de antemano para una producción segura, efectiva, controlable y a gran escala.
Se cree que el COVID-19, una nueva cepa de coronavirus, surgió en diciembre en la ciudad de Wuhan, en el centro de China. Desde entonces no ha parado de expandirse por todo el mundo, llegando a convertirse en una pandemia. El gigante asiático es el país más afectado, con 81.058 casos confirmados, 3.230 muertos y 68.798 curados.