Por Alejo Pombo
Martín Valenzuela atendía su ferretería en la ciudad bonaerense de Zárate cuando ingresó un hombre, simulando ser un cliente, pero le apuntó con un arma, que luego se estableció era una réplica de un revólver de aire comprimido, con fines de robo, sin sospechar que el comerciante tenía en su poder una pistola 9 mm. con la que le efectuó varios disparos, con el que lo mató. Además, uno de los tiros efectuados para, presuntamente, defenderse del robo, que destrozó la vidriera del local, rebotó en el piso e hirió a un albañil, que espera en la vereda su turno para ser atendido.
Si bien todo apunta a que el ferretero cometió un homicidio en «defensa propia», ahora se aguardan los resultados de la autopsia al cuerpo del fallecido, identificado como Rubén Darío Malvido (de 49 años) y las pericias al arma incautada, a los efectos de establecer sí no existió un «exceso en esa legítima defensa», en el marco de la causa que investiga la fiscal Andrea Palacios.
En tanto, mientras se concretaba el levantamiento de rastros en la escena del crimen, familiares del hombre asesinado se presentaron en el lugar, generándose incidentes, que motivaron la intervención policial para controlar la situación.
Todo ocurrió ayer, en horas del mediodía, en uno de los dos locales en los que funciona la ferretería RyM, ubicada sobre la calle Pellegrini, casi esquina José Ingenieros de Zárate, en momentos en que Valenzuela, de 42 años, acomodaba algunas mercaderías y Malvido entró, hizo una consulta de ocasión a su empleado y enseguida exhibió la supuesta arma, mientras exigía la entrega del dinero de la caja. En un rápido movimiento, el comerciante logró tomar su pistola y baleó, a corta distancia, en varias oportunidades al sindicado ladrón, quien recibió impactos en el pecho, el abdomen y la ingle.
Al mismo tiempo que el frustrado asaltante caía y quedó muerto en el interior de la ferretería, un amigo del ferretero y vecino del barrio (quien trabajaba como albañil y estaba haciendo refacciones en su casa) que estaba cerca de la puerta, recibió una esquirla del proyectil en una de sus piernas y aún herido se subió a su camioneta para escapar.
Más tarde, este hombre, de 40 años, fue trasladado al Hospital Virgen del Carmen de Zárate, donde fue asistido por los médicos, presentando una lesión sin mayores consecuencias.
Tras el aviso al 911, personal de la comisaría 1era. de Zárate se desplazó al lugar, convocando a la Policía Científica al constatar que Malvido estaba fallecido y brindando contención a Valenzuela y su empleado, quienes luego fueron trasladados para prestar declaración ante la fiscal Palacios, que también se hizo presente en el comercio, a los efectos de supervisar las tareas investigativas.
La causa, caratulada como «homicidio en ocasión de robo», quedó radicada en la Unidad Funcional de Instrucción Nro. 7 de Zárate Campana, donde se dispuso el secuestró del arma del comerciante (que dijo tener registrada) y la réplica que portaba el fallecido. En tanto, no se adaptó ninguna medida restrictiva de la libertad del ferretero, al considerar que actuó en legítima defensa, aunque el proceso continuará.
Anoche se realizaba la operación de autopsia al cuerpo de Maldivo, pericia fundamental que aguarda la fiscal Palacios para establecer la cantidad de impactos de bala que sufrió y si ingresaron de frente o por la espalda, añadieron las fuentes consultadas. Con este resultado, la fiscal procura determinar si el comerciante aprehendido cometió un homicidio bajo la figura de «legítima defensa dNo se adoptó ninguna medida restrictiva de la libertad del ferretero, al considerar que actuó en legítima defensa.
PELIGROSO
Tenía frondoso prontuario penal eEl sindicado ladrón asesinado en la ferretería contaba con antecedentes penales, por otros robos a comercios y recientemente había salido en libertad, al cumplir una condena por un asalto ocurrido en 2010 y anteriormente, había protagonizado otro hecho delictivo en doble golpe a una joyería y una sucursal bancaria en el centro de Zárate, en abril de 2005.
Rubén Darío Malvido fue sentenciado por el delito de «robo calificado y privación de la libertad», junto a dos cómplices, pero ya en la cárcel se dedicó a la actuación, integrando el grupo de teatro de los internos, que llegó a presentar obras, tanto dentro del penal, como en otros escenarios, según consignó el portal InfoZC.com. Otro recordado caso que dividió las opiniones dAl trascender que un ferretero había asesinado a tiros a un ladrón en Zárate, surgió de inmediato un hecho que también ocurrió en la misma ciudad bonaerense y fue calificado como de legítima defensa, tras una larga polémica y la decisión de un jurado popular.
Aquel recordado episodio tuvo como protagonista al carnicero Daniel «Billy» Oyarzún, quien al sufrir un asalto en su local salió a perseguir a los dos jóvenes que le habían sustraído el dinero de la recaudación y los atropelló con su auto. En ese caso, registrado en septiembre de 2016, al embestir la moto, el llamado «carnicero justiciero», terminó causando heridas de gravedad a Brian González, de 24, al que luego siguieron golpeando hasta que falleció, mientras su cómplice había escapado, aunque resultó detenido.
El accionar de Oyarzún, quien en principio fue aprehendido y tres días más tarde recuperó la libertad, dividió las opiniones en todo el país
