Por Alejo Pombo
El Banco Central citó y emplazó al ex ministro de Producción Francisco Cabrera para que comparezca ante ese organismo por supuestas irregularidades vinculadas con su desempeño como presidente del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE).
Cabrera -quien fue ministro entre 2015 y 2018 y luego asumió la presidencia del BICE- tiene diez días hábiles bancarios para comparecer en la Gerencia de Asuntos Contenciosos en lo Financiero de la autoridad monetaria.
Al ex funcionario del Gobierno de Mauricio Macri se le instruye un sumario caratulado «Banco de Inversión y Comercio Exterior S.A.», de acuerdo con lo previsto en el artículo 41 de la Ley de Entidades Financieras Nº 21.526.
En junio de 2018, tras ser desplazado de Producción, «Pancho» Cabrera pasó a ocupar la presidencia del BICE, una entidad que otorga créditos de mediano y largo plazo destinados a la inversión productiva y al comercio exterior cuyo único accionista es el Estado Nacional.
De acuerdo con un Aviso publicado por el Banco Central en el Boletín Oficial, Cabrera deberá comparecer «previa solicitud de turno mediante correo electrónico dirigido a la casilla de correo electrónico» de la Gerencia.
Durante el plazo de diez días otorgado, el ex ministro podrá presentar las defensas y ofrecer las pruebas que hagan a su derecho, indicándose que, en caso de no comparecer personalmente, su firma deberá contar con certificación bancaria o de escribano público, según el texto oficial.
El descargo y toda otra presentación que realice deberán ser dirigidos a la Gerencia, «bajo apercibimiento en caso de incomparecencia, de proseguir la tramitación con las constancias de autos hasta el dictado de la resolución final», advirtió la autoridad monetaria.
El actual presidente del BICE, José de Mendiguren, había encargado -al inicio de su gestión- una auditoría interna a los gastos y préstamos de la gestión anterior, a cargo de Cabrera.
En especial, de Mendiguren puso el foco en el crédito que el BICE le otorgó a la aceitera Vicentin, envuelta en un escándalo por los desembolsos de dinero de entidades financieras públicas.
Además Cabrera, durante su gestión en el BICE, concentró el manejo de los programas de Participación Publico Privada (PPP), que impulsaba la administración de Macri para la realización de obras públicas.
A través de los PPP, las concesionarias de infraestructura debían obtener el financiamiento y concretar las obras, a cambio de explotación comercial de rutas y autopistas que llegaron a ser licitadas, pero que finalmente no fueron realizadas.
Este esquema de participación público privada en la obra pública fue cuestionado desde su lanzamiento, a raíz de la experiencia negativa en otros países y, también, por el perjuicio que el diseño representaba para proveedores locales y para el Estado.
