La diputada de la Coalición Cívica y aliada fundamental de Cambiemos, Elisa Carrió, manifestó su enojo contra el Papa Francisco, tras conocerse la noticia de que el sumo pontífice le envió un rosario a la dirigente social Milagro Sala.
«Este es un llamado desesperado a la no violencia», tituló la diputada su mensaje en las redes sociales.
Y agregó: «Es sumamente peligroso alimentar la violencia sobre todo desde el plano espiritual».
Además consideró que: «Hay que defender al Presidente de la Nación, que busca la pacificación y que fue electo por vía democrática, es preciso no generar confusión».
Y luego dijo de manera contundente: «Espero en los Obispos de Argentina ya no en el Papa. A Roma no voy».
La líder de la Tupac Amaru, Milagro Sala , está detenida por instigar a la violencia y ahora por los delitos de asociación ilícita, defraudación y extorsión.