22 abril, 2025

Renuncia en la UNSL tras violentos incidentes en la toma del campus

El subsecretario de Asuntos Estudiantiles de la UNSL, Matías Funes, fue destituido tras ser acusado de provocar incidentes violentos en el campus de Villa Mercedes. Los gremios docentes y centros de estudiantes habían solicitado su renuncia al rector Víctor Moriñigo.

Por Alejo Pombo

En medio de un creciente conflicto en la Universidad Nacional de San Luis (UNSL), la presión de los gremios y estudiantes obligó a la destitución de Matías Funes, quien se desempeñaba como subsecretario de Asuntos Estudiantiles y Bienestar Universitario. El rector de la universidad, Víctor Moriñigo, accedió al pedido de renuncia luego de que varios sindicatos docentes y centros de estudiantes lo señalaran como responsable de los incidentes ocurridos en el acceso al campus del Centro Universitario de Villa Mercedes.

El episodio que desencadenó la renuncia de Funes tuvo lugar el pasado miércoles por la tarde, en el marco de una protesta pacífica organizada por estudiantes y docentes. Según los informes, la manifestación había sido decidida por amplia mayoría en una asamblea realizada el lunes 14 de octubre, donde los participantes acordaron una toma del campus para visibilizar sus demandas. Sin embargo, el conflicto escaló rápidamente cuando Funes, según la acusación, habría dirigido un grupo que protagonizó actos violentos contra los manifestantes.

Reclamos y tensiones
Los gremios ADU (Asociación de Docentes Universitarios) y SIDIU (Sindicato de Docentes e Investigadores Universitarios), junto a los centros de estudiantes de la Facultad de Ciencias Económicas y Jurídicas y de la Facultad de Ingeniería y Ciencias Agropecuarias (FICA), emitieron una nota formal al rector. El documento, firmado por figuras clave como Viviana Mercado de ADU y María Salas de SIDIU, detallaba los sucesos que envolvieron a Funes. En la carta, describen cómo los estudiantes y docentes fueron agredidos físicamente y verbalmente por personas bajo su mando.

La presidenta del Centro de Estudiantes de la Facultad de Económicas, Emma Carabias, y Nehuén Ortolani, representante del centro de estudiantes de la FICA, también apoyaron el reclamo. Ambos coincidieron en que Funes fue «el iniciador del conflicto» y que su actitud desató una serie de forcejeos, insultos y golpes que empañaron lo que inicialmente fue una protesta pacífica.

Decisión del rector
Frente a la gravedad de los señalamientos y el clima de tensión, el rector Víctor Moriñigo decidió actuar con rapidez. Durante la mañana del jueves, confirmó la salida de Funes de su cargo, poniendo fin a su controvertida gestión en la subsecretaría de Asuntos Estudiantiles y Bienestar Universitario. «No toleraremos ningún tipo de violencia en la universidad. El diálogo y el respeto deben prevalecer en todo momento», expresó Moriñigo al anunciar la destitución.

Este desenlace llega en un momento delicado para la UNSL, donde las tensiones entre la administración universitaria y los sectores estudiantiles y docentes han ido en aumento. La toma del campus de Villa Mercedes fue solo el último de una serie de reclamos que exigen mejoras en las condiciones laborales y educativas. Sin embargo, lo ocurrido el miércoles generó una ola de indignación que dejó al descubierto problemas más profundos en la gestión del bienestar estudiantil.

El cargo de Funes y su polémica gestión
Matías Funes ocupaba el cargo de subsecretario de Asuntos Estudiantiles y Bienestar Universitario, un puesto que muchos dentro de la universidad consideraban «curioso» debido a la poca claridad en sus funciones. Aunque el objetivo de su rol era velar por el bienestar de los estudiantes, las acusaciones en su contra señalan lo contrario. Según la dura carta presentada por los gremios, Funes encabezó a las personas que participaron de los actos violentos, minando la confianza en la figura que debía garantizar la paz y el respeto dentro del ámbito universitario.

Reacciones
La comunidad universitaria sigue en estado de alerta tras los incidentes. Por un lado, los gremios docentes y estudiantes aplauden la decisión de apartar a Funes, considerándola un paso hacia la pacificación y la resolución de conflictos mediante el diálogo. Por otro, la destitución de Funes genera preguntas sobre las responsabilidades que deberían asumir otros miembros de la administración.

Aún se desconoce si habrá más cambios en la estructura directiva de la UNSL, pero lo cierto es que este episodio ha dejado una marca profunda en las relaciones entre los estudiantes, los docentes y las autoridades universitarias. Mientras tanto, la protesta en el campus de Villa Mercedes continúa, y los manifestantes insisten en que sus demandas no solo deben ser escuchadas, sino también atendidas.