Filas y cupos: Estaciones de servicio en San Luis implementan restricciones en la venta de combustibles
Por Gabriel Rodríguez
Largas filas de autos y motos se formaron frente a las estaciones de servicio en San Luis, donde se venden combustibles con cupos. Algunos conductores esperaron hasta una hora para ser atendidos y se encontraron con la novedad de que solo podían cargar ciertas cantidades.
La escasez de combustible ha llevado a largas filas de automóviles y motocicletas frente a las estaciones de servicio en la capital puntana. Esta tarde-noche, algunas estaciones de servicio del centro experimentaron colas de varias cuadras. Los conductores, después de esperar en promedio una hora para ser atendidos, se encontraron con la sorpresa de que la nafta y el gasoil se vendían con cupos.
En la estación de Shell ubicada en avenida Lafinur y Pedernera, el camión de combustible llegó en horas de la siesta y la demanda fue tan alta que el suministro se agotó a las 19:30 horas. En ese lugar, se impuso un tope de carga de $5,000 para la nafta súper y $6,000 para la V-Power. En cuanto al gasoil, solo tenían V-Power Diésel y el límite de carga era de $8,000.
Cuando la venta de combustible se detuvo en esta estación, muchos conductores se dirigieron a la estación del Automóvil Club Argentino (ACA), ubicada en Illia y Constitución, donde el camión llegó pasadas las 18 horas. En este lugar, se implementó un sistema de cupos: solo se vendían 30 litros por vehículo.
Los conductores, en su búsqueda de combustible, enfrentaron largas esperas. Michel, uno de los clientes, comentó que esperó aproximadamente dos horas, primero en la fila de Shell y luego en la del ACA, donde tuvo que aguardar una hora más.
En otras estaciones, como la YPF El Salvador, también se aplicaron restricciones. La nafta tenía un límite de hasta $5,000 y el gasoil hasta $7,000. Los automovilistas y motociclistas esperaron alrededor de una hora y media para ser atendidos.
Ninguna de las estaciones de servicio pudo proporcionar información precisa sobre cuándo se normalizará la venta de combustibles en la capital puntana. La incertidumbre entre los conductores persiste mientras esperan ansiosamente poder cargar sus vehículos.
