El Gobierno nacional presentó hoy, a través del Ministerio de Defensa, una denuncia penal ante la Justicia Federal de Rosario por la falta de más de 11 millones de municiones de armamentos en la Fábrica Militar Fray Luis Beltrán, de Santa Fe, que se detectó tras una auditoría.
Según confirmó a DyN el director general de Asuntos Jurídicos de la cartera, Pablo Tosco, la denuncia por «defraudación» fue radicada esta mañana en la secretaría 2 del juzgado federal de Rosario 4 al notificar que desaparecieron «más de 9 millones de fulminantes para municiones calibre 9 milímetros y más de 1,7 millones para fusiles FAL».
Si bien las pruebas que tienen hasta el momento «no dan para señalar a nadie como responsable», el ministro Julio Martínez no descartó la posibilidad de que ese material bélico haya sido distribuido entre bandas narcos o algún grupo paramilitar.
Al respecto, Martínez especificó que también se detectaron «otras inconsistencias» como «la existencia de municiones para armamentos que no están registrados, lo que confirma el funcionamiento de un canal paralelo de fabricación y venta».
Las tareas de control que se realizaron en Fray Luis Beltrán consistieron en el primer tramo de una auditoría integral que lleva adelante el ministerio para evaluar la situación de cada una de las 6 sedes de Fabricaciones Militares que funcionan en el país.
Por su parte, Martínez fue consultado por radio La Red acerca de la posibilidad de que el faltante de esos suministros tuviera como fin el mercado negro de armas y respondió: «Es nuestra sospecha, es probable».
A su vez, cuando le preguntaron si podrían estar implicadas bandas narcos nacionales, de Brasil o algún grupo paramilitar, el jefe de la cartera castrense sostuvo: «No descartamos ninguna de esas posibilidades, no estamos en condiciones de asegurarlo, pero por eso vamos a la Justicia para que se vaya hasta las últimas consecuencias». «No podemos permitir que el Estado sea una caja de provisión de armas para el delito», enfatizó Martínez, tras lo cual informó que se toman «todos los recaudos y controles para evitar estas situaciones de corrupción». En el relevamiento se comprobó el faltante de 9.133.620 fulminantes para pistolas 9 milímetros y 1.790.800 fulminantes para fusiles FAL.
Los fulminantes son piezas únicas colocadas en el culote del cartucho que estallan y encienden la pólvora ante el golpe del martillo del arma o percutor.
En la auditoría se encontraron también sin registrar 180.498 proyectiles de munición 9 milímetros y dentro de esta búsqueda unos 84.000 cartuchos fabricados en 2014, pero en cajas con fecha de 2015.
Fueron hallados además 757.682 proyectiles sin anotar para FAL de 7,62 milímetros y Mauser de 7,65 milímetros.