26 abril, 2024

Cinco escuelas cursarán en otros edificios en Villa Mercedes

El entusiasmo, los nervios y las expectativas por arrancar un nuevo ciclo lectivo chocaron contra una dura realidad este año en cinco colegios de Villa Mercedes.

Por Gabriel Rodriguez

Como sus instalaciones quedaron inhabilitadas, convivirán en otros espacios y algunas retrasaron las clases.

El entusiasmo, los nervios y las expectativas por arrancar un nuevo ciclo lectivo chocaron contra una dura realidad este año en cinco colegios de Villa Mercedes. Las escuelas que fueron más afectadas por el temporal de finales de enero tuvieron un arranque atípico y debieron pensar estrategias para garantizar las clases: mudanzas temporales a otras instituciones, arranques tardíos y hasta modalidades mixtas de cursada.

A un mes del histórico granizo que azotó a la ciudad de la Calle Angosta, todavía quedan secuelas en la infraestructura de la mayoría de los establecimientos. Pero los que sufrieron roturas más graves directamente no podrán contar con sus instalaciones por varios meses, porque las piedras destrozaron completamente los techos y los dejaron inutilizables.

Ese fue el caso, por ejemplo, de la Escuela Especial Nº 6 “Doctora Maestra Montessori”, que está ubicada en el mismo conjunto de manzanas que el Hogar Escuela, la Universidad Provincial de Oficios (UPrO) y el Instituto de Formación Docente Continua (IFDC), frente al Policlínico Regional “Juan Domingo Perón”, es decir un sector que resultó muy castigado.

“Desde después del temporal estuvimos trabajando, primero para hacer un relevamiento de los daños del edificio. Pero además, proyectando los posibles lugares donde desarrollar las actividades. Esto implicó ponernos en contacto con otras instituciones, que nos abrieron las puertas de una manera muy generosa”, expresó la directora Liliana Arias.

Con una matrícula de unos 90 estudiantes con discapacidad, ayer arrancaron divididos en otros dos establecimientos. Los del turno mañana asistieron al Nº 11 «Benito Juárez» y los de la tarde, a la Nº 26 «León Guillet».

“Nuestra ubicación es estratégica porque está cerca del Hospital y convergen todas las líneas de transporte urbano. Por eso, a los padres tal vez se les va a complicar un poco más asistir a estos lugares, pero todos nos manifestaron su buena voluntad y su apoyo, y vamos a tener tolerancia con los horarios y asistencias”, agregó.

La misma situación viven las comunidades educativas de dos instituciones vecinas, la Técnica Nº 3 “Eva Duarte de Perón” y la de Jornada Completa N° 444 “María Eva Duarte de Perón”, que funcionan en lo que se conocía como Hogar Escuela y que se tuvieron que trasladar a algunos sectores del Instituto Sagrado Corazón y la Nº 18 “Nicolasa Berrondo de Quiroga”, respectivamente.

“Estamos en un período de adaptación, en el tiempo y en el espacio. Tienen que acostumbrarse los profesores, los administrativos, los ordenanza, los tutores y los alumnos, además de ubicarlos donde tienen que ir. Lo bueno es que priman la solidaridad y la tolerancia para todos”, expresó Ana María Tita, la directora de la Técnica Nº 3.

El objetivo, sostuvo, es garantizar el cumplimiento del ciclo lectivo, aunque deberán adaptar los contenidos porque ya contarán con los mismos espacios y recursos. “En estos tiempos de crisis deben primar el entendimiento y la paciencia. Todo el mundo le pone la mejor voluntad”, dijo.

La escuela, al igual que otras, arrancó a tomar los exámenes a los alumnos que deben rendir materias e iniciarán la cursada recién el 13 de marzo.

La misma fecha estableció la Nº 2 “Juan Esteban Pedernera”, más conocida como la Nacional. La particularidad es que el edificio estaba en una obra de renovación completa, realizada por el gobierno provincial. Y ahora deberán volver a empezar con las reformas. «Teníamos toda el ala norte lista para empezar a pintar, pero la tormenta rompió absolutamente todo lo que estaba hecho. Hasta que no se ponga la cubierta nueva, no podemos utilizar nada, hay que arrancar de cero”, expresó Silvana Tuma, quien está al frente del establecimiento.

El viernes fue aprobada por el Concejo Deliberante la excepción a la normativa que regula los patrimonios históricos, por lo que podrán reemplazar las tejas rotas por chapas. Con esa herramienta legal podrán avanzar con las refacciones. Mientras tanto, deberán cursar con una modalidad mixta en tres lugares diferentes: en la escuela “Vicente Dupuy”, en el polideportivo de la Normal y en la Casa de la Cultura. «A todos les pedimos paciencia. Esto fue consecuencia de la naturaleza y contra eso no hay nada que se pueda hacer. Los chicos van a poder tener clases, nos acomodaremos hasta que tengamos el colegio nuevo», agregó Tuma.