Cinco familias pasaron la noche en el Salón de Cultura Municipal de a localidad puntana de Buena esperanza, en el sur de la provincia, en tanto que otras 20 se mudaron a viviendas de familiares y amigos. El intendente, Fernando Larroudé, dijo que “palian el inconveniente de a poco” y consideró que la piedra de hace dos días fue el peor problema que tuvieron.
La noche en Buena Esperanza pasó tranquila. Cinco familias aún se encuentran evacuadas en el Centro de Cultura Municipal de Buena Esperanza tras el temporal que azota la zona hace ya casi una semana. Mientras que otras veinte se mudaron de manera propia hacia viviendas de familiares o de amigos.
“Ahora está nublado pero no llueve. Hay apenas una pequeña llovizna. La situación es complicada porque hace dos días que cayeron 180 milímetros. Hace muchos años que no se ve tanta agua junta en la localidad. Pero el peor factor fue la piedra que destrozó viviendas”, analizó el intendente de Buena Esperanza, Fernando Larroudé.
La Municipalidad cuenta con la colaboración de San Luis Solidario y del senador del Departamento Dupuy, Sergio Freixes. “Estamos paliando la situación lo mejor que se puede dentro del panorama que nos tocó”, manifestó el jefe comunal. Larroudé comentó que “las calles están inundadas y se parecen ríos”.
Mientras que su par de Nueva Galia, Sergio Moreira, dijo que el panorama parece mejorar. “Anoche se cortó el suministro de agua cerca de la medianoche. Los desagües ya no están tan tapados y los ayudamos con bombas para acelerar el proceso. Ahora está abriendo el cielo pero sigue el clima feo. Sabemos que va a llover más y estamos alerta. Por ahora recorremos las zonas”, explicó.
En esa localidad no hay familias evacuadas pero tienen, a mano, el número de teléfono de San Luis Solidario por cualquier imprevisto.
El intendente de Batavia, Gerardo Díaz, explicó que entre la madrugada del domingo y el lunes llovieron 170 milímetros de agua. “Pudimos controlar la situación gracias a los Bomberos Voluntarios de la localidad y a los contratistas Mauro Díaz y Lucas Negre, quienes ayudaron a quitar el líquido con motobombas”, señaló ya más aliviado.
A las 14 no llovía y Díaz dijo que ya no había peligro. “Quiero agradecer al director de Vialidad Provincial (Daniel Bassi) porque nos ayudó a realizar un canal en la zona este del predio ferroviario para desviar el agua hacia el sur, sin perjudicar a nadie por ser un lugar bajo”, explicó el jefe comunal. Además comentó que obtuvo la ayuda de Freixes y de todos los ciudadanos de Batavia, aunque no hubo evacuados.
