25 abril, 2024

Hallan asesinados a balazos a un cirujano plástico y a su mujer en City Bell

Un cirujano plástico y su mujer cosmetóloga fueron hallados asesinados a balazos en el interior de su camioneta chocada en la localidad platense de City Bell, y los investigadores sospechan que pudo haberse tratado de una venganza y no de un robo, ya que en el vehículo había dinero y tarjetas de crédito.

Un cirujano plástico y su mujer cosmetóloga fueron hallados asesinados a balazos en el interior de su camioneta chocada en la localidad platense de City Bell, y los investigadores sospechan que pudo haberse tratado de una venganza y no de un robo, ya que en el vehículo había dinero y tarjetas de crédito.

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Las víctimas fueron identificadas por fuentes policiales como Guillermo Luna (65), un cirujano que en 2001 estuvo procesado por estafas a la obra social IOMA, y su mujer, Laura Silvana Favre (42).

Ambos fueron encontrados anoche asesinados de un balazo cada uno dentro de su camioneta Kia color negra, patente HRK440, chocada contra una torre de alumbrado y con las luces prendidas, en la calle 490, entre 136 y 137, en las afueras de La Plata.

La policía llegó al lugar tras un llamado al 911 realizado a las 22.40 por vecinos que escucharon disparos y luego el impacto del vehículo.

La fiscal penal platense a cargo de la causa, Leyla Aguilar, informó que el cadáver de la mujer «estaba sentado en el asiento del acompañante y el masculino en el asiento trasero, en una posición extraña, ya que estaba recostado en el asiento trasero, con las piernas hacia atrás».

Si bien espera pericias complementarias sobre los rastros y pruebas levantados hoy en la escena del crimen, la fiscal adelantó que «aparentemente los impactos se hicieron dentro del habitáculo del vehículo».

Es que según fuentes policiales en el interior del habitáculo se encontraron dos balas calibre .45, pero en el suelo, al lado de la camioneta también se halló una vaina servida de una pistola 9 milímetros y un proyectil intacto de ese calibre.

La autopsia realizada hoy determinó que el cirujano murió por un impacto de bala en el pecho con orificio de salida por la espalda, mientras que su pareja recibió un tiro en el cuello, debajo de la oreja izquierda que le destrozó la mandíbula.

La necropsia no determinó a qué calibre correspondieron las heridas mortales por lo que será necesario hacer pruebas complementarias.

Sobre el móvil del crimen, Aguilar expresó: «No puedo descartar ninguna hipótesis, no tengo una hipótesis más firme que otra», aunque reconoció que en poder de las víctimas «había dinero, documentación personal, varias tarjetas de crédito».

«No sé qué otra cosa de valor podría haber habido dentro del vehículo que tal vez hayan sustraído pero por lo pronto había una suma de dinero que en hechos comunes de robo la sustraen y, de hecho, la víctima (Favre) tenía una pulsera de oro intacta», detalló.

Además, la policía secuestró la cartera de la mujer con unos 6.000 pesos y nueve tarjetas de crédito.

Los investigadores sospechan que en el hecho no participó otro vehículo y que la camioneta venía a alta velocidad ya que derrumbó dos postes de luz y finalmente impactó contra la torre de cemento donde quedó detenida.

La hipótesis que siguen es que los homicidios ocurrieron dentro del habitáculo de la camioneta con uno o dos homicidas que iban junto a la pareja.

Sin embargo, intentaban determinar el móvil de los crímenes, aunque se maneja la hipótesis de una venganza como la principal, ya que un testigo de la zona que escuchó los disparos y el estruendo del choque de la camioneta contra la columna, también habría oído discutir a una pareja luego del hecho.

Es que Laura Favre tenía en su cuenta de la red social Twitter varios mensajes agresivos hacia alguna mujer a la que llama «gato cascoteado», cuyas iniciales parecen ser «M. L.» y a la que incluso le dedica «emoticones» de un revólver y un cuchillo.

Según testigos, Favre y Luna se encontraban en pareja desde hacía casi 20 años, tenían una hija de 15 y ambos trabajaban en dos clínicas de estética que dirigía el cirujano, una en la ciudad de Buenos Aires y la otra en La Plata.

Luna estuvo involucrado en 2001 en la causa penal conocida como «Lolagate», una estafa cometida contra la obra social provincial IOMA mediante la colocación de implantes de siliconas a mujeres policías que se facturaron como operaciones comunes.

En el marco de esa pesquisa se determinó que fueron más de 60 las mujeres que recibieron implantes de siliconas y se realizaron otras cirugías estéticas mediante la cobertura de IOMA, que las admitió creyendo que se trataba de operaciones de várices y hernias.

El médico estuvo procesado y detenido por 68 hechos junto a otros cinco profesionales acusados de esa estafa, que se descubrió cuando una mujer policía, identificada como Lilia Sicher, denunció ante la Justicia un caso de mala praxis en una práctica estética que le había cubierto IOMA como una cirugía de várices.