20 abril, 2024

El sorprendente cruce entre Carrió y Michetti

La vicepresidenta Gabriela Michetti se encontraba hoy «sorprendida y dolida» por los dichos de la diputada Elisa Carrió, quien la descalificó anoche por su accionar relacionado con la designación de Ricardo Echegaray en la AGN y la acusó de «entregar su conciencia», aunque la ex senadora decidió poner paños fríos y no salir a confrontarla.

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Michetti manifestó a los dirigentes políticos que la llamaron por el tema estar «sorprendida» porque «no habló mal de Carrió y está dolida por la situación».

La vicepresidenta -una de las dirigentes del PRO que más insistió ante Mauricio Macri para que conforme una coalición con la UCR y la Coalición Cívica- explicó a sus interlocutores que ella no dijo que la diputada era «inmanejable» sino que respondió al periodista de La Nación por esa palabra y que ella respondió que «todos saben que nadie maneja a Lilita».

El entorno de Michetti se ocupó de dejar trascender que la vicepresidenta «dilató en diciembre y enero pasado todo lo que la ley permitió la designación de Echegaray» ante la Auditoría General de la Nación y que por eso «recibió dos cartas documentos del PJ».

«Si se seguía bloqueando a Echegaray se incurría en delito. Hoy con un procesamiento, Michetti firmó en el mismo día el decreto para sacarlo de la AGN», subrayaron a Télam desde el michettismo.

Uno de los dirigentes del PRO que habló con la vicepresidenta opinó que «Gabriela no va a contestarle porque cree que estas situaciones le hacen mal al Gobierno y quiere poner paños fríos».

Carrió embistió contra Michetti enojada por los dichos de la vicepresidenta días pasados y dijo que había «entregado su conciencia», le reclamó que «haga silencio» al hablar de ella y hasta la calificó de «superficial».

«Yo jamás hubiera entregado mi conciencia para ser vicepresidente y hubiera puesto mi renuncia antes de designar a un delincuente como Echegaray. Esta es la diferencia», disparó Carrió.

Horas después, justamente se conoció el procesamiento judicial de Echegaray por falso testimonio, lo que habilitó a Michetti a firmar un decreto interno que exige la salida del ex jefe de la AFIP de la AGN.

La relación entre dos cofundadoras de Cambiemos pasó por muchos vaivenes a lo largo de los últimos años de su vida política.

Cuando Carrió era una dura crítica de Macri mientras era jefe de Gobierno, el nexo entre ella y el PRO era Michetti, con quien además la une la profesión de fe católica y un vínculo cercano durante varios años con el ex cardenal Jorge Bergoglio.

En el distrito porteño, Michetti y Carrió compitieron en 2009 (ambas como candidatas a diputadas) y luego la tensión se acrecentó durante la campaña de 2013 cuando UNEN y PRO disputaron por pocos puntos el primer puesto en la Ciudad (Michetti le ganó a «Pino» Solanas para el Senado pero Carrió empató con el rabino Sergio Bergman para Diputados).

Desde entonces, Michetti y Carrió siempre procuraron mantener una cordial relación en los medios y la confluencia en Cambiemos facilitó la convivencia, pero quienes conocen a ambas saben que el vínculo a veces es áspero y la relación es más tirante.