19 abril, 2024

Condenan a 19 años al tío de Wanda Nara por abuso sexual de menores

Carlos Colosimo, tío de la ex modelo y actual empresaria Wanda Nara, fue condenado hoy a 19 años de prisión por el Tribunal Oral en lo Criminal 3 de San Isidro por abuso sexual de tres menores amigas de su hija, informó la fiscal Laura Zyseskind.

Carlos Colosimo, tío de la ex modelo y actual empresaria Wanda Nara, fue condenado hoy a 19 años de prisión por el Tribunal Oral en lo Criminal 3 de San Isidro por abuso sexual de tres menores amigas de su hija, informó la fiscal Laura Zyseskind.

El hombre fue encontrado culpable de los delitos de «abuso sexual gravemente ultrajante en concurso con promoción de la corrupción de menores y tenencia ilegítima de arma de guerra», luego de que se comprobara que abusó de tres amigas de su hija desde que tenían entre 8 y 9 años hasta los 12 en algunos casos.

«Claramente el tribunal entendió nuestro planteo. Hablamos de delitos graves, reiterados en el tiempo y con agravantes de todo tipo, desde la edad de las victimas hasta la tenencia de armas», indicó Zyseskind a Télam.

La fiscalía había pedido una condena de 25 años, pero tanto la familia como los representantes del ministerio público aseguraron haber quedado «muy conformes con el fallo».

«La familia quedó conforme con el proceso. En tiempos en los que la Justicia está tan bastardeada, yo digo que la hacemos entre todos porque, en este caso, desde el colegio de las chicas hasta las familias aportaron su parte para que esto llegue al final que esperábamos», expresó la fiscal.

Respecto de las pruebas presentadas, se aportaron los testimonios de las menores víctimas -recabadas en dispositivo de cámara Gesell- así como las de sus padres y autoridades del colegio al que asistían.

Para la fiscal «las huellas psíquicas que dejaron los delitos en las niñas fueron muy claras» ya que los testimonios fueron contrastados por las peritos psicólogas especializadas en niñez y por el equipo de psicólogos aportados por la familia de las menores y, en ambos casos, coincidieron los relatos y síntomas descritos por las chicas.

Por otra parte, Zyseskind afirmó que durante la investigación de la causa detectaron la existencia de otras dos víctimas, «pero que hoy no nos puedan contar lo que les pasó, por lo que esperamos que, con terapia de por medio, tal vez puedan hacerlo en un futuro».

Según la fiscal, la hija de Colosino fue «claramente víctima en relación a diversos delitos» y el juicio «ha sido un proceso de sanación para que (las abusadas) puedan abrirse, contar lo que les pasó y luego ir cerrando esas heridas».

Actualmente algunas de las niñas siguen con tratamiento psicológico, pero la fiscal destacó «que haya habido adultos que las escucharan y que hayan creído en su relato y que hayan puesto en conocimiento de la Justicia lo que estaba pasando. Eso es lo que más sana para este tipo de delitos».

Colosimo, fisicoculturista de 48 años, negó todos los cargos en su contra argumentando que fueron motivados porque «las niñas lo veían como un superhéroe» y que estaban «enamoradas» de él, informó la fiscal.

Detenido desde septiembre de 2015, el condenado permanecerá en prisión a la espera de que su abogado apele la causa ante el tribunal de casación de La Plata.

El escándalo se había destapado a principios de agosto de 2015, luego de que una de las niñas se acercara a una de las preceptoras y le dijera que quería contarle «algo que le había ocurrido fuera del colegio».

En su relato, la menor habría acusado al padre de su mejor amiga -compañera de colegio- por varios abusos que habían comenzado en 2012 y ocurridos tanto en la casa del condenado como en un barco de su propiedad.

Dos días después de aquel hecho, otras dos alumnas y compañeras de la primera víctima se acercaron a la preceptora y relataron que ellas también habían sufrido abusos.

En una de las denuncias presentadas por el padre de una de las menores se dejaba constancia de que «el papá de la amiga le tocaba las partes íntimas de su cuerpo, los genitales, y lo hacía cuando la mamá de su amiga no se encontraba”. Además, el acta refleja que la nena contó que “también había visto cuando dicha persona (Colosimo) se paseaba por la casa luego de bañarse, desnudo, mostrando sus genitales”.