El presidente electo Alberto Fernández participó de una reunión en la Cámara de Diputados de la Nación, donde quedó conformado el bloque del Frente de Todos.
Alberto Fernández al presentar al hijo del ex presidente de la Nación, Néstor Kirchner, recordó parte de sus vivencias y emocionó a los legisladores presentes y al propio Máximo Kirchner. Quien a partir del 10 de diciembre, será el presidente del bloque del Frente de Todos.
Fernández afirmó que Máximo era «la conciencia crítica de Néstor Kirchner y mía cuando tomábamos decisiones de gobierno», y destacó las virtudes del hijo de los ex presidentes Néstor y Cristina Kirchner y elogió la unidad de los diferentes espacios que integrarán la bancada mayoritaria de la Cámara baja.
«Máximo siempre fue la conciencia crítica de Néstor y mía cuando tomábamos decisiones de gobierno», destacó el ex jefe de Gabinete en su discurso, según dejó trascender una diputada que participó de la reunión.
Fernández también puso de relieve que «Máximo heredó lo mejor de Néstor: prestarle atención a todos. Para él no hay dirigentes más o menos importantes, hay compañeros», y resaltó «ya no es un chico, es un hombre hecho y derecho, y ha tenido dos padres espléndidos».
El presidente electo destacó el llamado a la unidad, para demostrar que el Frente de Todos es una muestra de voluntad de las diferentes vertientes, que pueden convivir en un espacio.
El diputado nacional, Carlos Ponce, representante de San Luis en el Congreso, participó de la reunión y afirmó que «el mensaje del futuro presidente fue contundente para que todo el PJ esté unido».
En la reunión se despidió a Agustín Rossi de su papel como Diputado Nacional, ya que será el nuevo ministro de Defensa de la Nación, cargo que ocupó en el último mandato de Cristina Fernández.
Los diputados recibieron el mensaje y en ellos prima la necesidad de buscar acuerdos permanentes frente a los próximos pedidos que haga Fernández, una vez que asuma la presidencia de la Nación. Todos entienden que el nuevo gobierno necesita una base de apoyo, y que el Congreso no tenga grietas.
A sólo seis días de que Alberto Fernández asuma como nuevo presidente, el peronismo sella la unidad en la Cámara baja y crea un bloque de 121 diputados que le permitirá ser la primera minoría en el recinto. En segundo lugar quedará Cambiemos con un interbloque que contendrá a cerca de 119 legisladores.
